San Ricario, también conocido como Riquerio, fue un sacerdote del siglo VII nacido en la región de Amiens, Neustria, actualmente parte de Francia. Su vida cambió radicalmente tras escuchar la predicación de monjes escoceses, lo que lo llevó a abrazar una vida de penitencia y retiro en el eremo del bosque de Crézy.
Conversión y Vida Monástica
Impresionado por el mensaje de fe y devoción de los monjes, Ricario decidió dedicarse completamente a la vida religiosa, convirtiéndose en un ejemplo de humildad y devoción para sus contemporáneos.
Legado y Celebración
San Ricario es recordado por su compromiso espiritual y su vida de retiro y oración. Su festividad se celebra el 26 de abril, día en el que muchos fieles conmemoran su incansable fe y dedicación.