El Beato Agustín Ota es recordado como un valiente mártir de la Compañía de Jesús en Japón. Nacido en Goto, su vida fue un testimonio de fe y valentía en tiempos de persecución religiosa. El 10 de agosto de 1622, fue decapitado en la ciudad de Iki por su inquebrantable fe en Cristo.
La festividad del Beato Agustín Ota se celebra cada 10 de agosto, recordando su sacrificio y dedicación. Es uno de los muchos santos y beatos con el nombre de Agustín, como San Agustín de Hipona.
Su historia inspira a muchos a seguir un camino de fe y coraje, incluso ante la adversidad.