San Íñigo de Oña, conocido también como San Eneco, fue un destacado abad en el monasterio de Oña, situado en la actual provincia de Burgos, España. Vivió en el siglo XI y falleció alrededor del año 1060.
Vida y Legado
Caracterizado por su pacifismo, San Íñigo fue un hombre de paz, cuya influencia trascendió las barreras religiosas de su tiempo, siendo llorado por cristianos, judíos y musulmanes tras su muerte.
Canonización y Festividades
Fue canonizado en 1259 por el Papa Alejandro IV. Su festividad se celebra el 1 de junio, un día en que se recuerda su legado de paz y convivencia.
San Íñigo también es un nombre celebrado el 31 de julio, en honor a San Ignacio de Loyola.