San Alfonso María Fusco nació en Angri, Italia, y fue un presbítero que dedicó su vida al servicio de los más desfavorecidos. Su obra se centró en la educación y cuidado de jóvenes pobres y huérfanos, lo que lo llevó a fundar la congregación de Hermanas de San Juan Bautista, una orden dedicada a la enseñanza y la caridad.
Vida y Obra
Alfonso María Fusco nació en una familia de agricultores y desde joven sintió la vocación sacerdotal. Ordenado presbítero, comenzó a trabajar intensamente con la comunidad agraria y pronto se dio cuenta de la necesidad de brindar educación a los jóvenes más pobres.
Fundación de la Congregación
En 1878, fundó la congregación de las Hermanas de San Juan Bautista, con el objetivo de proporcionar educación y refugio a niños huérfanos y jóvenes sin recursos. Su legado continúa vivo a través del trabajo de la congregación en diversas partes del mundo.
Legado
San Alfonso María Fusco fue beatificado por su dedicación y amor hacia los más necesitados, y su festividad se celebra el 6 de febrero. Su vida es un testimonio de fe y servicio a la comunidad.