San Ángel de Furcio, un beato agustino nacido en Nápoles durante el siglo XIV, es venerado por su fervor religioso y dedicación al reino de Dios. Celebrado cada 6 de febrero, su legado sigue inspirando a los fieles.
Vida y Obra
Como presbítero de la Orden de San Agustín, San Ángel mostró un compromiso excepcional con su fe. Su vida es un testimonio de entrega y servicio.
Festividad
El 6 de febrero se conmemora su vida y obra, recordando su impacto en la comunidad religiosa de Nápoles.
Legado
San Ángel de Furcio es un ejemplo perdurable de devoción y espiritualidad dentro de la Iglesia.