San Arialdo de Milán, celebrado el 27 de junio, fue un valiente diácono del siglo XI. Conocido por su férrea oposición a la corrupción eclesiástica, Arialdo se enfrentó a los clérigos simoníacos y depravados de Milán. Su celo por la pureza de la Iglesia lo llevó al martirio, convirtiéndose en un símbolo de integridad y fe inquebrantable.
Vida y Martirio
Arialdo nació en Milán, una ciudad que en su época enfrentaba conflictos morales y eclesiásticos. Como diácono, Arialdo dedicó su vida a reformar la Iglesia, denunciando prácticas corruptas que incluían la simonía y la inmoralidad entre el clero.
Legado
Su legado perdura como ejemplo de valentía y compromiso con la justicia divina, siendo venerado por su devoción y sacrificio.
Más Información
- Wikipedia: San Arialdo de Milán