El Beato Rogerio, nacido en Todi, Umbría, es reconocido por ser un ferviente discípulo de San Francisco de Asís. Este presbítero de la Orden de los Hermanos Menores vivió en el siglo XIII, reflejando una vida de austeridad y servicio. Su festividad se celebra cada 5 de enero, recordando su legado espiritual en la región de la Umbría.
Legado y Devoción
El legado del Beato Rogerio se centra en su devoción y capacidad para inspirar a otros a seguir el camino de San Francisco. Aunque no es tan conocido como otros santos, su vida es un testimonio de humildad y dedicación.