San Magnerico fue un destacado obispo del siglo VI, conocido por su ferviente dedicación a la fe cristiana y su papel como discípulo y sucesor de San Niceto. Nació en Tréveris, una ciudad que hoy se encuentra en Alemania. A lo largo de su vida, demostró una profunda devoción y compromiso con la Iglesia, acompañando fielmente a San Niceto incluso durante su destierro.
Vida y Obra
San Magnerico es recordado principalmente por su incansable celo pastoral. Como obispo de Tréveris, trabajó arduamente por la conversión y la salvación de las almas, emulando el ejemplo de su mentor, San Niceto.
Legado
Su legado pervive en la Iglesia como un ejemplo de fe y dedicación pastoral. San Magnerico es celebrado el 25 de julio.