San Carlos de Seze, un destacado religioso de la Orden de los Hermanos Menores, vivió en el siglo XVII. Desde su infancia, trabajó arduamente para ganarse la vida, pero nunca dejó de inspirar a sus compañeros a seguir el ejemplo de Cristo y los santos. Su vida religiosa estuvo profundamente marcada por su dedicación a la adoración del Santísimo Sacramento del Altar.
San Carlos es celebrado el 6 de enero, y su legado perdura como un modelo de devoción y humildad dentro de la comunidad franciscana.