San Tranquilino Ubiarco es recordado por su valiente testimonio de fe durante las persecuciones religiosas en México. Nacido en el siglo XX, ejerció su ministerio en Tepatitlán, México. A pesar de los riesgos, nunca dejó de cumplir con sus funciones como sacerdote, lo que finalmente lo llevó a su martirio.
Vida y Martirio
Durante un periodo de intensa persecución contra la Iglesia, San Tranquilino fue apresado y colgado de un árbol, sellando su destino como mártir. Su sacrificio es un poderoso recordatorio de la resistencia de la fe frente a la adversidad.
Legado
Hoy en día, es venerado por su valentía y devoción. Su festividad se celebra el 5 de octubre, inspirando a los creyentes a mantenerse firmes en su fe.