San Alejo es venerado como un ejemplo de humildad y devoción. Nacido en el siglo IV en una familia noble de Roma, dejó su hogar y su riqueza para vivir como un mendigo. Su vida, dedicada a la fe y a la caridad, es celebrada cada 17 de julio.
Vida de San Alejo
San Alejo nació en una familia acomodada en Roma. Según la tradición, renunció a sus privilegios y vivió humildemente, dedicándose a ayudar a los necesitados. Se instaló en el monte Aventino, cerca de la basílica que hoy lleva su nombre.
Legado y Festividad
San Alejo es recordado no solo por su sacrificio personal sino también por su ejemplo de vida cristiana. Su festividad se celebra el 17 de julio, especialmente en Roma, donde dejó una huella imborrable.
Enlaces y Recursos
- Wikipedia: San Alejo