La Beata Catalina Cittadini nació en Bérgamo, Italia, y tras quedar huérfana a temprana edad, dedicó su vida a la educación y al cuidado de niñas pobres. En Somasca, fundó el Instituto de las Ursulinas de Somasca con el objetivo de ofrecer educación cristiana. Fue beatificada el 29 de abril de 2001 por el Papa Juan Pablo II.
Vida y Obra
Catalina se destacó como una maestra competente y paciente, estableciendo un legado educativo que continúa inspirando. Su festividad se celebra el 5 de mayo.
Legado y Festividad
El legado de Catalina sigue vivo a través de las Ursulinas, quienes continúan su misión educativa. Su vida es un ejemplo de dedicación y servicio.