San Britón de Tréveris fue un destacado obispo del siglo IV, conocido por su valiente defensa de la fe cristiana en la Galia Bélgica. Celebrado el 5 de mayo, se le recuerda especialmente por su oposición a las doctrinas de Prisciliano, un hereje cuyo movimiento causó gran controversia en la Iglesia de la época.
Colaboración con Grandes Santos
San Britón trabajó junto a figuras prominentes como San Ambrosio de Milán y San Martín de Tours en sus esfuerzos por mantener la pureza de la fe.
Legado Duradero
A pesar de no lograr detener la violencia contra los priscilianistas, su legado como defensor de la ortodoxia perdura hasta hoy.