San Margarito Flores es recordado como un mártir valiente que, en medio de la persecución religiosa en México, se mantuvo firme en su fe. Nacido el 22 de febrero de 1899 en Taxco de Alarcón, México, dedicó su vida al sacerdocio y al servicio de su comunidad.
Vida y Martirio
Durante la gran persecución contra la Iglesia en México, San Margarito fue arrestado por su condición de sacerdote. A pesar de las amenazas, no renegó de su fe, lo que le llevó a ser fusilado el 12 de noviembre de 1927 en Tulimán. Su sacrificio es un testimonio de su devoción y coraje.
Legado
La vida de San Margarito Flores inspira a muchos fieles a seguir su ejemplo de fe y perseverancia. Su festividad se celebra el 12 de noviembre, día en que se honra su memoria y legado.
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