El Beato Gregorio Lakota, obispo de Przemysl, es recordado por su coraje y su firmeza en la fe durante la persecución religiosa en el siglo XX. Nacido en Ucrania, dedicó su vida al servicio de la Iglesia y de su comunidad.
Martirio en Siberia
Encerrado en el campo de concentración de Abez, Siberia, soportó torturas hasta su muerte el 5 de noviembre de 1950, permaneciendo fiel a su creencia en Cristo.
Legado
El Beato Gregorio Lakota es un símbolo de resistencia espiritual y dedicación, con su festividad celebrada cada año el 5 de noviembre.