El 17 de noviembre recordamos a los santos Zaqueo y Alfeo, quienes fueron mártires en Cesarea de Palestina en el siglo IV. Durante la persecución de Diocleciano, ambos confesaron valientemente su fe en Dios y Jesucristo. A pesar de sufrir numerosos tormentos, no renunciaron a sus creencias, lo que los llevó a su condena y ejecución.
Historia de los Mártires
Zaqueo, cuyo nombre también es compartido por otros santos como San Zaqueo de Jerusalén, y Alfeo, fueron conocidos por su devoción inquebrantable. La persecución de Diocleciano fue una de las más severas contra los cristianos, y su valentía en este contexto es especialmente destacable.
Legado y Celebración
Su sacrificio es conmemorado cada año el 17 de noviembre, y su historia sigue inspirando a muchos fieles en la actualidad.