La Beata Ramona Perramón Vila es recordada por su valentía y fe durante la persecución religiosa en España entre 1934 y 1937. Miembro de la Orden de Predicadores, Ramona dedicó su vida al servicio de Dios y de los demás.
Beatificación
Fue beatificada en una ceremonia multitudinaria por el Papa Benedicto XVI el 28 de octubre de 2007 en Roma, junto con otros 497 mártires españoles.
Legado
Su legado perdura como un ejemplo de fe inquebrantable y sacrificio. Cada 6 de noviembre, su vida es celebrada por aquellos que honran los valores de coraje y devoción.