El Beato Salvio Gómez Gutiérrez, cuyo nombre de nacimiento fue Victoriano Gómez Gutiérrez, es recordado como uno de los mártires de la persecución religiosa en España durante los años 1934 a 1937. Nació el 8 de noviembre de 1884 en Villamorón, Burgos, España, y falleció el 8 de octubre de 1936 en Barcelona.
Fue miembro de la Sociedad de María, dedicando su vida a la fe y al servicio de los demás. En 2007, fue beatificado por el Papa Benedicto XVI junto con otros 497 mártires. Su memoria se celebra el 6 de noviembre.
Legado
El legado del Beato Salvio es una fuente de inspiración para quienes buscan fortaleza en su fe. Su historia es un recordatorio del valor y la devoción en tiempos difíciles.